Bartleby de agosto

Imagen tomada de http://meanderin.gs/
A veces, distanciarse de la escritura es algo más que necesario. En realidad es que «preferiría no hacerlo». Creo que cuando tienes demasiadas historias bullendo en la cabeza, desórdenes habituales, pánico a que no fluyan como es necesario, acabas siendo un Bartleby provinciano y endomingado con tus escrituras. A los Bartlebys que son así, a los que emborronan solamente post-its y abrazan el eterno «ya habrá el momento de convertirte en tinta o en html» que les hagan la ola se la trae bien floja. Vaya, que se la suda, se la pela o, con bastarda metáfora marinera, «se la trae al pairo». Ya no solamente que les hagan la ola, sino que seas algo más que un pequeño rinconcito digital. Ya saben ustedes, si han llegado hasta aquí, que todo esto es, o no, mentira. Se escribe para entender por qué no nos quiere el mundo mundial. Se escribe para que te pasen la mano por el lomo y te digan que eres guay, que qué pena que no escribas más y en otros medios. Se escribe, muchas veces, para no ser el niño que juega solitario en un callejón, y también se escribe porque sí, porque te da la gana. Es verdad: qué cansados, que no cansinos, es hacer enumeraciones de motivos. I would prefer no to.
Los blogs, para los que nos dicen siempre lo que tenemos que hacer, son un agujero en el jersey de lo que-se supone que existe-gran proyecto literario. ¿Y si no lo tienes, y si realmente te da igual y te importa un soberano huevo hacer algo más? El mundo está lleno de aspirantes a sustituir a los oficiales creadores de opinión. Todo muy galdosiano. No me esperen por ahí. Hay gente que hace cosas en blogs- no de tecnología, no de moda y belleza- que cambia la silla recalentada del café por el teclado; la pantalla es aquella la ventana por la que se veía pasar inviernos, sentar cátedras y encontrar excusas para la queja, para la filosofía de refilón, para la creatividad verbal y la posible greguería, también para el fracaso de lo que no se logra plasmar. Un blog no tiene muchas veces aspiraciones; es el mundo de lo efímero asentado. Son reflexiones cogidas al vuelo, porque todo es ver pasar la vida y las primeras páginas de lo que no se participa. Para no preocuparte de «gústames» y de retuits, para que te den por saco los trols (y eso que los hay) porque haces lo que te da la realísima gana: no hay editor, eres tú y tu plantilla de wordpress. Y también reivindicar el derecho a ser dueño de las propias contradicciones: ¿quiere un blog ser un secreto a voces, un tesoro escondido, un algo a reivindicar en un posible futuro? ¿O quiere ser el robinson de una isla digital inexplorada? ¿Es quien lo escribe un flaneur que se mira en los escaparates al pasar o un frustrado y displicente tertuliano sin obra que sonríe de medio lado, ocultando su amargura? Joder, y yo qué sé, quizás todo sea un acto de narcisismo y pretendamos a todas horas disculparnos. Mucho ego y poca autoestima, mundo de actores, qué coño.
Yo solamente sé que esto es una plantilla de wordpress, que llevo varios años dándole a estas teclas y que me ha hecho feliz y descubridora porque no me obliga a nada. Me gusta, me divierte y a veces me da una pereza terrible. Me da la posibilidad de reflexionar sobre lo que leo, lo que escucho, aquello que aparece y se me queda en la retina. Y que cada vez que se acerca el cumpleaños de este cuaderno que no llevo en ningún bolsillo me veo a mí misma como alguien que quizás preferiría hacer otras cosas, que lleva mucho tiempo pensando que debe hacerlas o no, que no sabe si quiere hacer algunas novelas esbozadas o no hacerlas, que se lo sigue pasando bien aquí- de forma menos pautada- y que agradece que seais fieles y sigáis ahí. Podría seguir diciendo más cosas, pero ya se sabe que, al final, Bartleby vence siempre,dueño y rey absoluto de su paradoja genial y revolucionaria. Felices agostos, queridos míos.
ei!!: eres guay, qué pena que no escribas más y en otros medios….
Hay miles de blogs, docenas de blogs literarios… pero yo sigo el tuyo; como un ‘flaneur’ pero lo sigo…q lo sepas. Ah….. somos la 1ª generación d ‘blogeros’ o como se llame. Internet lo ha cambiado todo pero la buena literatura es la q tú escribes, ‘mi arma’: haz una selección d tus entradas, envíalas a un editor y tendrás impresa una colección de relatos/artículos en formato libro-papel pero no creo q el soporte sea hoy decisivo o no lo sé: yo te barro-copio-pego, meto en e-book en .pdf y te leo en la playa entradas antiguas…. brisita fresca para agosto: gracias….
¿te ha dao gustirrinín mi mano por tu ‘blogmo’?……
completamente de acuerdo con xavi!