Anchoas y Tigretones

Archivo para el día “septiembre 8, 2009”

¡Saca la lengua!!

 Saca la lenguaA mí, que escribo esto porque quiero y casi nunca lo corrijo, me gustaría ser como mi personaje. Ser tan chula, tan echadapalante y tan tremenda que nada me afectase. Quiero que me afecte, claro está, el dolor y la injusticia, aunque sean como parte de mi cómodo papanatismo occidental que se escandaliza ante la imagen y no mueve el dedo más que para coger cacahuetes o cervezas al lado del sofá. Pero cuando digo que nada me afecte hablo de que no me hieran, no me duelan, no me cabreen gratuitamente o me hagan perder energía y tiempo cosas que dicen de mí.

Podéis decir que la culpa es mía, que quien me manda a mí meterme en estos fregados si nadie me lo pide. Pero la que es reina de la inseguridad, lo es hasta el final. Me tocan las narices los comentarios solapados que llevan más hiel que otra cosa o que se quedan en el tópico vacío y poco hondo de un seudónimo o de un barniz de desfachatez. Alguna que otra insinuación en algún foro sobre mis capacidades tanto emocionales como intelectuales. Me encantaría ponerme en jarras y decir "qué está pasando aquí" bien alto y con ganas de camorra. Pero no me sale. Porque lo que quiere una insegura, lo que busca ante todo, es el beneplácito generalizado, el refrendo social, el amor universal aún de todos aquellos que la desconocen. Que sepan, por ejemplo, que, aunque odio justificarme, no hago más que buscar razones por las que soy como soy todos los días. Que maldigo mi maldita fragilidad emocional y que cuestiono absolutamente todas mis decisiones y mis pasos al frente. Que mi falsa seguridad no es más que inconsciencia y falta de miras para el futuro. Y que, aunque pienso en todo esto, tengo miedo de escribirlo porque sé que es cierto y no es más que una nueva desnudez. Y que, como siempre que escribo algo, respiraré hondo ante la tecla "submit" para enviarlo al incierto lugar donde hay público ávido de bondades y también de tropiezos. O donde no hay nada. Y eso, eso si que lo sé claramente, sería mucho peor.

Gracias por las críticas. Gracias por los puntos sobre las íes. Gracias por la discrepancia, por la discusión, por los nuevos puntos de vista. Pero eso sí: que nadie me diga que no puedo entender de algo o escribir sobre algo porque no soy experta o especialista en la materia. No defiendo la afición o la lengua floja ante cualquier cosa. No sé nada de mecánica cuántica, muy poco, quizás, de literatura o cine, o de arte y sus estrategias. Pero tengo ojos en la cara, un corazón que late, afán de conocimiento y, eso sí, mucha capacidad de aprendizaje. Y de experimentación. Y poco, muy poco interés en  gustar a la academia. Esa inseguridad sí me la puedo permitir. Por eso me propongo sacar la lengua más a menudo. A todos los que miran con falsa benevolencia. A los que no ven más allá de alguien entusiasmado con una nueva idea, con un nuevo proyecto, con una posibilidad. A sacar la lengua todos los días a los desdeñosos, a los displicentes, a los onanistas mentales, a la mentalidad de wikipedia y a los sinsentidodelhumor. ¡¡¡Saquemos la lengua!!!!

Este post va dedicado a los perseguidores de cualquier nacimiento, a la envidia y a la endogamia.

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