Efecto L’oreal: porque yo lo valgo
Gracias a Yolanda por enviarme esto. Gracias a todos los que me leéis ya desde hace más de un mes. Gracias a los que no habéis escrito comentarios por pudor, por desidia, por falta de tiempo…Gracias a Patricia que para leerme aprendió que un ordenador no era un enemigo y a Claudia, su hija, por enseñárselo. Gracias a Ana, Alicihin, Cronopia, Saldos Arias, Guti, Hal (si no llega a ser por ti, neno…), Lu, Pereiro (que me contó los lunares), Peñagrelo, Dulcamara, etc. etc…Gracias a todos .
Pero este post es para ti, porque siempre, siempre, quiero tener tus ojos sobre lo que yo escribo. Y porque te gustan las señoras de más de cuarenta. Te quiero mucho y lo sabes. Y porque las cronologías me las paso por el forro : efecto L’oreal, porque yo lo valgo.
Palabras de Santiago Gamboa, escritor colombiano.
Las mujeres de mi generación son las mejores. Y punto.
Hoy tienen cuarenta y pico, incluso cincuenta y pico, y son bellas, muy bellas, pero también serenas, comprensivas, sensatas, y sobre todo, endiabladamenteseductoras,esto a pesar de sus incipientes patas de gallo o de esa afectuosa celulitis que capitanea sus
muslos, pero que las hace tan humanas, tan reales. Hermosamente reales.Casi todas, hoy, están casadas o divorciadas, o divorciadas y vueltas a casar, con la idea de no equivocarse en el segundo intento, que a veces es un modo de acercarse al tercero, y al cuarto intento. Qué importa…
Otras, aunque pocas, mantienen una pertinaz soltería y la protegen como ciudad sitiada que, de cualquier modo, cada tanto abre sus puertas a algún visitante.
Nacidas bajo la era de Acuario, con el influjo de la música de Los Beatles, de Bob Dylan…. Herederas de la ‘revolución sexual’ de la década de los 60 y de las corrientes feministas que, sin embargo recibieron pasadas por varios filtros, ellas supieron
combinar libertad con coquetería, emancipación con pasión, reivindicación con seducción.Jamás vieron en el hombre a un enemigo a pesar que le cantaron unas cuantas verdades, pues comprendieron que emanciparse era algo más que poner al hombre a trapear el baño o a cambiar el rollo de papel higiénico cuando éste, trágicamente, se acaba, y decidieron pactarpara vivir en pareja.
Son maravillosas y tienen estilo, aún cuando nos hacen sufrir, cuando nos engañan o nos dejan. Usaron faldas hindúes a los 18 años, se cubrieron con suéter de lana y perdieron su parecido con María, la virgen, en una noche loca de viernes o sábado después
de bailar. Hablaron con pasión de política y quisieron cambiar el mundo.
Aquí hay algunas razones de por qué una mujer de más de 40 nunca te va a despertar en la mitad de la noche para preguntarte….’¿Qué estás pensando?’ No le interesa lo que estás pensando.
Si una mujer de más de 40 no quiere mirar un partido de football, ella no da vueltas alrededor tuyo. Se pone a hacer algo que ella quiere hacer y generalmente es algo mucho más nteresante. Una mujer de más de 40, se conoce lo suficiente como para estar
segura de sí misma, de lo que quiere, y de con quién lo quiere.Son muy pocas las mujeres de más de 40 a las que les mporta lo que tú pienses de lo que ella hace.Una mujer de más de 40, tiene cubierta su cuota de relaciones ‘importantes’ y ‘compromisos’.Lo último que quiere en su vida es otro amante posesivo. Es muy raro que entren en una competencia de gritos en medio de la ópera o de un restaurante caro. Las mujeres de más de 40 son generalmente generosas en alabanzas. Ellas saben lo que es no ser apreciadas lo suficiente. Tienen suficiente seguridad en sí mismas como para presentarte a sus amigas. Una mujer más joven puede llegara ignorar hasta a su mejor amiga. Las mujeres se vuelven psíquicas a medida que pasa el tiempo. No necesitas confesar tus pecados, ellas siempre lo saben.
Son honestas y directas. Te dicen directamente que eres un imbécil si es lo que sienten sobre ti. Tenemos muchas cosas buenas que decir de las mujeres de más de 40 y por múltiples razones.
Lamentablemente no es recíproco. Por cada impactante mujer de más de 40, inteligente, bien vestida y sexy hay un hombre con casi o más de 50….pelado, gordo, barrigón y con pantalones arrugados haciéndose el gracioso con una chica de 20 años.‘Señoras….. Les pido perdón por ello…. “
t veo y escribo desde mi peazo movil. Pruebo tu blog para q llegues a cada movil, a cada bolsillo, a todos. GRACIAS A TI,desde la admiracion.
Hal, no me hagas llorar que estoy sensible. Te quiero y eso no lo cambia nada, ni siquiera la vida. Un beso enorme y ponme las imágenes leñe, que te las mandé hace una semana, si es que no me curras ná!!! 😀
eeeeeh¡calmita que tengo mucho lío en mi departamento de alta tecnología explicando a mis compañero/as cómo se borra un acceso directo del escritorio, que un blog no es un cuenco para batir el huevo, que cuando el monitor está «roto» tienen que darle al botón de ON, que google no encuentra lo que ellas/os piensan en su cabeza sino lo que escriben en la búsqueda, que es inútil que pongan «quiero información sobre», que un pdf no es necesariamente igual a un jpg, que los ordenadores necesitan programas para ver los documentos, que aunque estén en una pantalla los textos hay que leerlos para entenderlos, que cuando «cae la red» es inútil que me metan correos advirtiendomelo precisamente porque ha caído la red, y un largo etcétera que no voy a detallar. Tu blog se ve muy chulo en el movil. Un día que he de escribirte para indicar cómo pueden acceder tus lectores habituales. Me voy que me dicen que alguien ha tapado el ventilador de un ordenador con un tapete de ganchillo y huele a quemado.
Buf nena, cómo me pones…mmmm…eres fantástica y temo conocerte porque seguro que me enamoraré de ti….seguro…uf…y sólo quedan horas para descubrirte…guatemouxion!!!!!!…Aggg cómo mola ser cuarentona.
Creo que cada idade ten a súa enerxía: abonda con deixala que se exprese.
Por outra parte, paréceme que, en realidade, lle tes medo á túa beleza. Por suposto que vexo mulleres de corenta, de cincuenta ou de sesenta,e incluso de máis, cunha sensualidade marabillosa, distinta da da adolescencia ou da xuventude, e, polo menos no meu caso, penso que só unha visión marcada polo exhibicionismo cinexético,tapadeira de complexos, frustracións e autoodios, pode empanar ese marabilloso regalo da vida.
Bicos
Bueno, pues como lo del exhibicionismo cinegético no lo entiendo, limitación mía sin duda alguna dado que la caza como deporte o entretenimiento no la concibo, me limito a escribir sobre lo que me divierte y entretiene. Y por supuesto que no me justifico, ¿miedo a la belleza?, joder, quien me diera…
Pola túa resposta, dáme a sensación de que algo sabes do que quero dicir co exhibicionismo cinexético. Caso de estar equivocado, deixámolo no terreo dos arcanos.
No do medo á propia beleza, paréceme que, en xeral, estamos moito máis predispostos a estar ben ca a estar mal, pero non somos conscientes. Coido que levamos moito mellor un fracaso ca un éxito, simplemente porque o esperamos.
Máis bicos
Algunas hemos necesitado cada uno de esos cuarenta y pico años para aprender a querernos de verdad, a apreciar cada arruga por la historia que lleva detrás y a ver la belleza en esos kilos que tanto hemos aborrecido (bueno, una menda sigue aborreciéndolos… quizás con los 50 apruebe esa asignatura), a aceptar nuestros caprichos, imperfecciones, egoísmos y decir, a pesar de todo… Es que soy cojonuda, coño!
No, gracias a tí, princesa, por regalarnos este espacio y tu tiempo. Y por acompañarme la mayor parte de estos 41 tacos.
Pues mira Peñagrelo, tiés toa la razón. Estamos estupendas y sin conjuros mágicos, a base de buena comida, buena bebida, y risas a esgalla. Y como siempre, el que prefiera el palillo, que se lo lleve a la boca. Gracias a ti por acercarte a mí en el año 197… en las Jesuitinas y decirme que te llamabas……. y que ibas a ballet, cosa que me pareció absolutamente fascinante (coño, por tu culpa me chupé doce años de clases total pa ná, porque a ti te dejaron abandonar al año siguiente pero a mí me obligaron a seguir con el «demiplié», el «granbatteman» y el «devulé»…ay, mis sueños con Barishnikocv se fueron al traste volando :DDD
Yo quiero ser una cuarentona adicta al consumo de zapatos de Manolo Blahnik.
ehhhh!…que es broma, ¡coño!
he vuelto un poquito, asi, timidamente.
besos